Fuerte Apache

Película escrita y dirigida  por Jaume Mateu Adrover, estrenada en el año 2007. En ella podemos ver la realidad que se da en un centro tutelar de menores. Educadores que trabajan día a día con niños y adolescentes que debido a sus circunstancias se encuentran allí, algunos de los profesionales se esfuerzan al máximo para que los chicos salgan adelante, destacando a Toni (Juan Diego), que deja la piel en su trabajo pero que en la mayoría de las ocasiones parece que sus esfuerzos son en vano. Aunque con la llegada de Tarik, un niño huérfano, al centro su vida da un giro inesperado.

A continuación nos centraremos en Tarik, fijándonos en varios aspectos fundamentales en la intervención educativa.

El primero de ellos será su CONTEXTO, dividiéndolo en dos: el microsocial y el macro social. Al hablar del contexto micro nos referimos, a su entorno más cercano, familia, amigos íntimos de ésta... podemos decir que Tarik es un niño huérfano de padre y madre, encontrándose en una  situación de desprotección, al no tener hermanos ni familiares en quien confiar. Unos tíos podrían encargarse de él , pero  Tarik huye de su país, Marruecos, para evitar que éstos se hagan con su tutela, debido al temor o la desconfianza que le producen. En cuanto al macrosocial, se corresponde con el resto de personas que rodean al niño, siendo su entorno desestructurado, al carecer éste de estabilidad, sin padres, con unos tíos no muy adecuados para cuidarle, sin apenas recursos, aparentemente sin apoyo externo... tanto es asi que la mejor salida que encuentra es marcharse, colándose en los bajos de los camiones para cruzar la frontera y llegar a España.

Otro aspecto en el que nos fijaremos es en el CONTEXTO EDUCATIVO, puede que éste sea escaso, no hay nada que nos indique si el niño estaba escolarizado en su país o no, pero lo que si es evidente es su gran interés por aprender,  por mejorar... aspiraba con estudiar, siendo su deseo acceder a la universidad.

También es muy importante detectar los FACTORES DE RIESGO, en este caso, aquellos que le llevan a estar en una situación de desamparo. Por un lado la carencia o la falta de afectividad, la pérdida de unos referentes ... debido a la ausencia de sus padres, esto es algo que debe destacarse ya que en caso contrario Tarik se hubiese visto apoyado por algún familiar o persona de confianza sus circunstancias hubieran sido otras. Además la falta de recursos económicos también es fundamental ya que al no disponer de éstos sus necesidades básicas se han quedado sin cubrir, alimento, techo en el que vivir, educación... todo esto puede hacer que la autoestima de Tarik se vea perjudicada, al considerar que su vida no tiene sentido, que todo le sale mal... Una vez que llega a nuestro país además de lo comentado con anterioridad se añade otro factor que puede difilcultar aún más su situación, el hecho de ser inmigrante, ya que mucha gente lo rechazaría por el hecho de proceder de un lugar que no es el suyo, junto con el desconocimiento del país, las costumbres, etc... dificulta en parte su nueva vida en España.


Además al  llegar al centro un elemento que entraña cierto riesgo para él son los compañeros con los que convivirá en el centro de tutela, ya que pueden ser una mala influencia, del mismo modo puede ocurrir lo contrario, que se conviertan en un gran pilar para él, siendo un factor inclusivo, de esto hablaremos a continuación.

No todo tiene que ser malo, es cierto que la vida de Tarik no es nada fácil, pero podemos ver la botella medio llena y buscar los FACTORES INCLUSIVOS, señalados con anterioridad, es decir, aquellos que ayudan a que el niño salga adelante, cuando llega a España, por un lado, los profesionales que van a trabajar con él pueden ser gran apoyo, ya que gracias a ellos irá saliendo adelante, pero éstos deberán tener cuidado y marcar una línea, separando su trabajo de su vida personal, es decir, deberán implicarse con Tarik lo justo y necesario, de lo contrario la intervención se verá afectada y no será todo lo buena que podría ser si el profesional deja de serlo, siendo esto además un peligro para el propio educador; esto último es lo que le ocurre a Toni, se implica de tal forma en su trabajo que su vida personal es casi inexistente, vive solo, no tiene pareja ni amigos con los que salir a despejarse, a causa de esto su autoestima está por los suelos, se encuentra desesperanzado y en ocasiones cree que su existencia no tiene sentido ya que lo que hace no sirve de nada.  


Por otro, los compañeros del centro pueden ser de gran ayuda para Tarik, convirtiéndose en su familia por el momento; además la actitud del niño es también algo a tener en cuenta, ya que se muestra al principio reservado y temeroso pero a medida que coge confianza con Toni, se muestra muy voluntarioso y colaborativo, esto último facilita en gran medida el trabajo del educador. Por último un factor que merece la pena destacar sería que el hecho de estar en España le protege ya que los derechos del menor amparan, teniendo derecho a la educación, a una familia, en este caso primero le destinan a un centro de tutela hasta que encuentren una familia para él o hasta que éste cumpla la mayoría de edad.


Para concluir señalaremos a continuación los objetivos que nos podríamos plantear con el niño. Antes de esto hay que conocer lo mejor posible su historia personal, ya que en función de sus vivencias, sus expectativas, de sus NECESIDADES los objetivos de intervención variarán en gran medida.


En el caso particular de Tarik, nos encontramos con un niño que ha sufrido una ruptura familiar, ya que perdió a sus padres en un accidente de coche y aunque vivía con su tío se escapó porque posiblemente no le trataba bien, es más puede que le maltratase. Por lo que sería fundamental que estableciese nuevos vínculos afectivos.


Otro de los objetivos prioritarios sería trabajar su autoestima, su autoconcepto, que no se sienta culpable  ni avergonzado por lo que ha ocurrido a su alrededor, que se valore y se quiera. Para conseguir así una mejora en su nueva convivencia en el centro y también fuera de él, así como también una mejora en las relaciones que establezca.


También podríamos trabajar con él el establecimiento de unos buenos hábitos de vida, higiene, alimentarios, una sana ocupación de su tiempo libre... evitando asi que caiga en malas costumbres o actividades, como puede ser el consumo de drogas, el robo para conseguir dinero fácil...  Además habrá que confiarle distintas responsabilidades como tener recogida su habitación, el respeto por los horarios establecidos en el centro, la autoadministración de su asignación semanal para sus gastos, esto se hacía con los menores en el centro, trabajando así un currículum oculto, una serie de valores que de forma ímplicita se tratan de inculcar.


Con todo esto, seguro que falta algo, intentaríamos que la vida de Tarik mejorase en la medida de lo posible.


Por último añadir una apreciación personal. Al ver esta película, bastante fiel a la realidad, decir por un lado algo que en alguna ocasión ya he mencionado, es una pena que se hagan este tipo de películas ya que reflejan dura y cruda realidad , me encantaría leer al final de cada una de éstas que son ficción y que nada de que lo visto en ellas guarda parecido con lo que día a día vivímos. Pero desgraciadamente se basan en hechos y en historias reales, en este caso, circunstancias en las que un menor se puede ver por desgracia, niños de diez, doce años tengan que colarse por ejemplo en un camión en busca de un futro mejor, o niños de familias muy desestructuradas, que por no haber tenido un buen apoyo se ven abocados al consumo o distribución ilegal de drogas, al robo o a cosas peores. Es una pena que esto ocurra.


Por otro lado decir, que es necesario que estas películas existan para dar a conocer y hacer consciente a todos y cada uno de nosotros de las distintas realidades que viven otras personas, y que nadie está libre de que eso mismo que vemos en ella podemos sufrirlo nosotros mismos en cualquier momento. 


Cuanto más avanza la carrera soy más consciente de que el trabajo del educador es muy importante y delicado, ya que trabajaremos con vidas de personas, no pudiendo tomar decisiones a la ligera porque de ellas dependerá en cierto modo el rumbo o trayectoria de éstas, cosa que me preocupa, ya que un error por nuestra parte puede significar retroceder o deteriorar aún más el estado del individuo/os con los que intervengamos. Al mismo tiempo es muy arriesgado una implicación completa por nuestra parte en los casos que se nos presenten, ya que ellos no pueden ser toda nuestra vida, es decir, tenemos que implicarnos, eso es indudable, pero en la justa medida evitando hacer de lo profesional algo personal, ya que cabe la posibilidad, como le ocurrió a Toni, de que perdamos el rumbo, nuestra dirección. Esto último también me inquietó.


Esperemos que gracias a una buena formación podamos contribuir a que la vida sea un poquito mejor.